Agosto también puede ser un buen mes para visitar las bodegas de aquellos vinos que nos han seducido durante todo el año. Salir un día de excursión, visitando pueblos y tierras de viñedos, de gente que ama su entorno y transmite ese cariño a los visitantes. Incluso para quedarse unos días en alguna de las muchas ofertas de Enoturismo que han ido surgiendo en los últimos años. Portales como Viajeros del Vino, contienen mucha información y destinos interesantes donde escoger.
Esta vez le tocó el turno a las Bodegas Hispano Suizas en el Pontón, cerca de Requena, donde el diseño y el paisaje se funden para acoger a estos laureados vinos. Allí ya habían empezado a vendimiar las variedades blancas y pudimos ver cómo llegaban en cajas y eran almacenadas en cámaras de frío a la espera de empezar la fermentación y comenzar ese proceso casi mágico de la elaboración de un vino.
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